Al momento de alquilar un piso o una habitación, de seguro, habrás escuchado: “también se debe pagar la fianza” y como inquilino piensas que es una forma de sacarte dinero. Te comprendemos, hemos estado ahí y, para ser honestos, también lo hemos pensado; aunque estás tanto en lo cierto como en lo erróneo. Más que una forma de pedir más dinero es una garantía para el propietario que su piso estará bien y se cumplirán las obligaciones.
Verás, cuando se alquila un piso estás bajo el amparo de la LAU, la Ley de Arrendamientos Urbanos, pero cuando alquilas una habitación, lamentamos decirlo, pero queremos mantenerte informado, solo estás bajo la protección del Código Civil. Es decir, si se quiere, pero no te lo recomendamos, solo es necesario un pacto verbal. Lo ideal es que decidas pedir por escrito la negociación verbal a la que habrás llegado con la otra parte.
¿Pero qué tiene que ver esto con la fianza? Para ser honestos, muchísimo. Al no estar amparado con la LAU se está libre de pactos. No obstante, dentro del acuerdo verbal podéis definir cuánto será la fianza. Lo ideal es que no supere los dos meses de alquiler, además del mes en curso. Recomendamos que dentro de esta conversación establezcan las obligaciones a cumplir.
La fianza es un salvavidas para el propietario. Por ejemplo, en caso de que desees irte de la habitación sin previo aviso, la fianza ayudará al propietario a pagar el mes mientras busca otro inquilino. O bien, si por algún motivo quebráis algún objeto los gastos se cubrirán con la fianza. Sin embargo, todo depende de lo que hablen ambas partes.
En el caso que una agencia sea la encargada del piso del propietario -como nosotros-, el acuerdo verbal se realiza con la agencia, aunque es probable que anteriormente se acordarán ciertas obligaciones con el propietario, las cuáles serán transmitidas al futuro inquilino. No obstante, nunca se realizará un escrito sin contar con la aprobación del inquilino.
Es importante contar con esta información para que no se pasen de listos y para que, como inquilinos, comprendamos para qué se utiliza la fianza y por qué debemos pagarla. Si deseáis más información, o buscáis alguna habitación, no dudéis en contactarnos.